BLOG PERIODÍSTICO Y CULTURAL CENTRADO, FUNDAMENTALMENTE, EN LA PUBLICACIÓN DE ARTÍCULOS DE OPINIÓN SOBRE TEMAS DE ACTUALIDAD ELABORADOS POR MARIA PEREZ UBIERA.

viernes, 30 de octubre de 2009

RESPUESTA A LOS COMENTARIOS A MI ARTÍCULO: "CASO MARTA DEL CASTILLO" del 29 octubre 2009.

En respuesta a los tres comentarios recibidos en mi blog, en relación con mi último artículo dedicado al caso de Marta del Castillo, he de decir que la ignorancia es muy mala. Y me explico:

Yo no defiendo a los asesinos de la joven, que no niña, joven, ya que ahora tendría 18 años, si ese o esos personajes no hubieran acabado con su vida. Por tanto, Sra. Schoenig, la invito a que vuelva a leer el artículo porque, créame, no se ha enterado vd. de nada. Y, a diferencia de su comentario, mi artículo está redactado de una forma absolutamente clara y ordenada. En cambio, yo no puedo responder a la segunda parte de su comentario porque sólo son palabras sueltas e inconexas, de las que una puede deducir cualquier cosa, sin llegar a saber nunca si realmente quiso decir éso o todo lo contrario. Yo simplemente hablo de que no hay forma legal de obligarles a confesar lo que hicieron con el cuerpo, y que, yendo más allá, tampoco hay forma ilegal de conseguirlo, porque, salvo que se les inyectase el suero de la verdad, siempre y cuando éste sea realmente efectivo (cosa que dudo, pero a la vez ignoro), a ver cómo se puede hacer hablar a alguien que no quiere hacerlo.

Ellos ya están detenidos e imputados, ellos van a ser juzgados, y supongo que serán condenados, y yo lo celebraré, si se demuestra que son los verdaderos culpables, cosa que parece bastante evidente ¿verdad?.

Yo nunca defenderé a unos asesinos, sino que defiendo un sistema penal garantista frente a uno totalitario y fascista. Yo defiendo la Democracia y la legalidad vigente en un sistema democrático, como es el español, por suerte para todos nosotros, ya que Sra. Schoenig, Sr. Wolfric y Sr/a. Anónimo/a(="valiente"), por si vds. lo ignoran o lo han olvidado, en este país, durante casi 40 años, al igual que sucede actualmente en muchos países, se vivió una situación de miedo, represión e inseguridad jurídica. Razón por la que muchos de nuestros más importantes intelectuales, artistas, científicos y demás personas valiosas e inteligentes decidieron vivir exiliados, por no tragar con la maquinaria fascista que privaba a los españoles de sus derechos y libertades básicos, fundamentales, universales...Pillan la idea, ¿verdad?. Espero que sí, porque, de lo contrario, tendré que ratificar mi primer apunte: la ignorancia es muy mala, y el no enterarse de lo que se lee es peor aún, pero esta vez aplicada directamente a vds.

Concluyo, porque no es momento de entrar en más detalles. Pero mi opinión sobre los tipejos que cometen este tipo de actos ya la detallaré en futuros artículos. Y verán que, lejos de defenderlos, los ataco directamente, los repudio y soy la primera en exigir que se les condene, conforme a lo establecido en las normas penales vigentes, y que CUMPLAN ÍNTEGRAMENTE LAS PENAS, sin la posibilidad de salir de prisión, si ésa fuera la pena impuesta, ni un sólo segundo antes del tiempo fijado en la sentencia.

¿Ven? ¡¡¡No se han enterado de nada !!!

De todos modos, he de hacer un apunte, en relación con el Sr.Wolfric, dado que él no sólo sí se ha enterado de lo que he querido decir en mi artículo, sino que, además, estoy bastante de acuerdo con lo que expone en su comentario acerca del funcionamiento real del sistema judicial y policial, que no siempre es todo lo eficiente que desearíamos. Y, en relación con este caso en concreto, me temo que, dado que los implicados tienen derecho a mentir para autodefenderse, no hay posibilidad alguna de imponerles castigo penal al respecto. Con respecto a los gastos de la búsqueda, seguramente sí podrían serles repercutidos, pero si se declaran insolventes, y se demuestra que no poseen bienes suficientes para afrontarlos, es como si no se les hubiese condenado a nada...Bueno, lo de siempre, para no variar..

Saludos sinceros a Wolfric.

jueves, 29 de octubre de 2009

CASO MARTA DEL CASTILLO


Aún a riesgo de no ser políticamente correcta, lo que hará de mi postura algo nada popular, populista, ni mucho menos populachero(cosa que agradezco)he de dar mi más sincera opinión sobre este caso, que llena páginas y páginas en períodicos y revistas de información, y horas y horas de cháchara en programas de televisión.

Sé que ha sido un suceso muy duro, un hecho muy triste, pero al que envuelven circunstancias no muy diferentes de las que rodean a otros muchos casos similares, en los que alguna joven desaparece, se presume su asesinato, pero nunca se halla el cuerpo.

Es cierto que en este caso han descubierto y detenido a los presuntos asesinos, y que éstos, a diferencia de otros de su calaña, no han confesado dónde han ocultado el cuerpo. ¿Y qué?, están en su perfecto derecho, y realmente nadie puede obligarles a hacer lo contrario. Ellos han tomado esa decisión y asumen las consecuencias, sin más. Y nada hay que se pueda, ni que se deba hacer, para revertir este hecho.

Es obvio que la calificación moral de los sujetos no sacaría muy buena nota en la valoración que cualquier ciudadano de bien (o medio de bien) pudiera hacer, pero aquí no estamos tratando hechos morales, sino jurídicos, y digo más, de sentido común. Por ello no dejo de sentirme, incluso, ofendida cada vez que oigo a los familiares de Marta insinuando o diciendo a las claras que hay que obligarles a decir dónde está el cuerpo. Y yo invito a la familia del Castillo a que me digan exactamente cómo pueden obligar los cuerpos de seguridad a confesar ese hecho. ¿Qué pretenden, que los torturen? Porque, si no, no sé cómo van a conseguirlo. Y voy más allá, ¿creen que con esos medios coercitivos y absolutamente ilegales van a lograr la confesión total de los hechos?. Pues permítanme que lo dude, es más permítanme que, incluso, aunque con esos métodos fascistas, lograsen que contaran toda la verdad con pelos y señales, he de recordarles que, POR SUERTE, vivimos en un Estado de Derecho, y que tenemos un sistema penal totalmente garantista, y que hay muchos miembros de las distintas polícias que han sido juzgados y condenados por el uso abusivo de sus funciones.

Comprendo su dolor, incluso comprendo su egoísmo en relación con este tema, pero vuelvo al inicio de este artículo y les recuerdo que en una situación similar a la suya, salvando las diferencias que pudieran darse, hay miles de familias en todo el mundo, digo más, en todo el mundo civilizado, y a nadie con dos dedos de frente y sentido de la responsabilidad y de los derechos y dignidad humanos se le ocurriría pedir semejante tropelía.

El cuerpo de su hija tal vez no aparezca nunca (tengo varias teorías, nada fantasiosas, que podrían confirmar esta hipótesis), o tal vez sí lo haga. Pero, desde luego, lo que no es de ley es pretender que los presuntos autores confiesen cualquier cosa, sin observar las normas vigentes en este maravilloso Estado Constitucional en el que, pese a no ser perfeccto ni funcionar de forma infalible, me siento orgullosa de vivir, como ya he manifestado en numerosas ocasiones.
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martes, 27 de octubre de 2009

CRÓNICA DE UNA MUERTE ANUNCIADA, de Gabriel García Márquez


28 agosto 2009

"El coronel no tiene quien le escriba" no ha sido suficiente para saciar mi sed de García Márquez, por lo que he continuado con la lectura de otra de sus novelas.

Esta vez he elegido "Crónica de una muerte anunciada":

Interesante relato, breve igual que el anterior, en el que el autor, basándose en acontecimientos sucedidos durante su juventud, en su pueblo natal, nos describe a la perfección una serie de situaciones y personajes, cuyos destinos están condicionados por costumbres atávicas que, en ocasiones, les obliga a actuar en contra de sus más profundas convicciones personales.

Todo ello les conduce a situaciones carentes de lógica y justicia, que tratan de legitimar con argumentos vinculados a la "honra" y al "comportamiento debido y esperado".

Invito a cualquier persona con sensibilidad y gusto literario refinado a adentrarse en la lectura de este breve relato, así como en la de cualquier otra obra del gran maestro colombiano.

Esperamos con avidez la publicación de la seguda parte de su autobiografía.

Besos eternos a Gabo.
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martes, 6 de octubre de 2009

EL CORONEL NO TIENE QUIÉN LE ESCRIBA, de Gabriel GARCÍA MÁRQUEZ.


Después de la decepción que me llevé con Joyce, he decidido apostar por un valor seguro, y he vuelto a la lectura de unos de mis "autores fetiche": Gabriel GARCÍA MÁRQUEZ.

En esta ocasión he elegido su segunda novela: "El coronel no tiene quién le escriba".

Se trata de una obra breve pero, al igual que todo lo que escribe, engancha y conmueve. Su lenguaje es depurado y sencillo. Trata temas cotidianos y cercanos, normalmente inspirados en sus experiencias vitales y las de su familia y amigos.No haciendo, en esta ocasión, ninguna excepción en este sentido, puesto que el propio autor ha hecho referencia, en más de una ocasión, a este hecho sucedido a uno de sus abuelos.

Obviamente, aconsejo esta obra, como cualquiera de las suyas.

No tengo más remedio que confesar mi especial debilidad por GABO.
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jueves, 1 de octubre de 2009

JUAN RAMON JIMÉNEZ

Madrid 17 de enero de 1916

Poema I

¡Qué cerca ya del alma
lo que está tan inmensamente lejos
de las manos aún!
Como una luz de estrella,
como una voz sin nombre
traída por el sueño, como el paso
de algún corcel remoto
que oímos anhelantes,
el oído en la tierra;
como el mar en teléfono...
Y se hace la vida
por dentro, con la luz inextinguible
de un día deleitoso
que brilla en otra parte.
¡Oh, qué dulce, qué dulce
verdad sin realidad aún, qué dulce!


"Diario de un poeta recién casado", 1917.
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